12 octubre 2015

Inexpugnable


Reverencia a la gente

El diccionario de la Real Academia Española define "inexpugnable" con tres acepciones: "Que no se puede tomar o conquistar por las armas", "Inaccesible o de acceso muy difícil" y "Que no se deja vencer ni persuadir". Cualquiera de las tres (o las tres) encajan a la perfección con el momento que está atravesando Novak Djokovic en el circuito. Ya iremos a las estadísticas puras pero como anticipo, conquistó Beijing este fin de semana por sexta vez en seis participaciones y lo hizo ante Rafael Nadal 6/2 6/2 en una hora y media. Lo demolió, especialmente en el segundo set. 29 victorias sobre 29 partidos en la capital china para el serbio...

Menos de cuatro games perdidos por partido acumuló Djokovic (18 en total) durante toda la semana en Beijing (récord 2015). 6/1 6/1 a Simone Bolelli, 6/2 6/1 a Ze Zhang, 6/2 6/2 a John Isner (13°), 6/2 6/3 a David Ferrer (7°) y 6/2 6/2 a Rafael Nadal (8°). Trituró a sus rivales. No los dejó jugar. Servicios, derechas, reveses, cortadas... le salió todo. En los pocos momentos de tensión por los que pasó, siempre salió airoso, con tiros profundos, dominando a sus rivales sin importar sus características. Novak eludió la contaminación en el aire con mucha destreza y volvió a hacerse fuerte (invencible) en el torneo que más veces lo vio ser campeón.

Un ídolo de masas que aporta para la causa

"Me las arreglé para mantener la calma, seguir con el plan de juego agresivo y hacer que se mueva. Funcionó muy bien. Creo que mantuve ese nivel de agresividad y el poder en mis golpes. Supe que con el tiempo él iba a cometer errores y dejar bolas cortas para que yo pudiera dominar los puntos. El saque me ayudó mucho, más del 80% de primeros servicios, siete aces y terminando la acción winners, eso me funcionó muy bien durante toda la semana, me ayudó a ganar muchos puntos gratis", un análisis perfecto de la semana de "Djoker" explicada por él mismo, minutos después de consagrarse en en el país asiático.

El historial de enfrentamientos personales entre Nadal y Djokovic es la rivalidad más veces disputada de la historia, que se vuelve cada vez más igualada. 23-22 adelante el español, aunque permanece abajo en finales entre sí 10-13. El trofeo de Beijing significó el 56° de "Nole" en su carrera ATP en 82 finales disputadas. En 2015 compitió en trece torneos de los cuales en doce alcanzó la final y en ocho fue campeón. Números absurdos. Solo cayó antes del partido por el título en cuartos de final de Doha ante Karlovic en el primer certamen de la temporada. ¡68 victorias en 73 partidos, 93% de efectividad! Número uno del mundo por escándalo.

Intentó dar pelea ante un rival que está jugando a otra cosa.

En líneas generales, Nadal fue de menos a más en la ciudad donde fue campeón olímpico en 2008. Su mejor partido fue la final, aunque los número digan lo contrario. Fue sorteando contrincantes con dificultades e incluso con su juego irregular característico del 2015. Jack Sock fue el que le trajo más problemas en cuartos de final, partido que tuvo que remontar. Contra Djokovic tuvo varias oportunidades para quebrar y equiparar el juego en el primer set pero el serbio no lo dejó. El español alcanzó su quinta final del año (3-2), la primera sobre cemento. En total acumula 97 finales (67-30), sexto en la lista histórica de más definiciones ATP en la Era Abierta.

"Rafa" comentó en unas lineas su actuación en la final: “Creo que para el primer set, ese 6/2 fue demasiado, tuve muchas oportunidades. Luego en el segundo set los dolores en mi pie derecho me hicieron perder un poco la concentración”. Nadal fue atendido al comienzo del segundo set por un dolor en el pie derecho, lo que asustó a todos. Pero a pesar de los dolores y la final perdida, el manacorí fue positivo sobre su semana: "Estoy feliz de cómo he jugado. Todas las mejoras son importantes, incluso las pequeñas, y creo que esta semana he mejorado muchas cosas, saco mucho de positivo de esta semana”.
Fuera de la deportivo, aunque con incidencia directa en el juego, este año se palpó la contaminación alarmante en el aire de Beijing. Varios fueron los jugadores afectados durante la semana de tenis por este problema ambiental que aqueja a esta ciudad hiper industrializada. Los niveles de polución preocupan a los habitantes y sobre todo a turistas o personas que deben asistir a Pekin por diversos compromisos. Estudios de la Universidad de Beijing afirman que por la contaminación, la ciudad es "casi inhabitable para los humanos". El smog es tan denso que no solo no deja ver con normalidad, sino que afecta la salud humana al respirar ese aire altamente contaminado.

Martin Klizan fue el más efusivo en redes sociales contra el ATP500 chino, alegando ataques de tos y vómitos tras su partido ante Fognini. Hasta publicó una foto suya con barbijo. Otro afectado fue Jo-Wilfried Tsonga que pidió asistencia médica en medio de su partido por mareos, producto de la falta de aire limpio en su cerebro. Estos atisbos de denuncia contra el torneo no tuvieron ninguna respuesta por parte de las autoridades. Para peor, la nueva política de la ATP limita los "comentarios publicados" por una posible “conducta contraria a la integridad del deporte” contra torneos, jueces, jugadores y sponsors involucrados en el tenis profesional. El dinero manda...

Daniel Vitale Pizarro

No hay comentarios:

Publicar un comentario